domingo, 12 de junio de 2016

Una espera agridulce

Hace 7 días tuve la primera ecografía. Estaba de 6.4 semanas. La verdad es que fui super nerviosa a la cita. No tenía ningún motivo para pensar que algo iba mal. Pero al no tener apenas síntomas y los pocos que tengo pueden ser causados por la progesterona y el estradiol, pues estaba preocupada.

El "genio" nos recibió con una gran sonrisa, como siempre, y muy bronceado, felicitándose por la primavera española que se está viviendo en Alemania estos días.  Enseguida me hizo pasar a la camilla.

En cuanto apareció la imagen en la pantalla, el "genio" se quedó mirando fijamente sin decir una palabra. Y lo que probablemente solo fueron unos segundos a mi me pareció un momento eterno.

Entonces, volviendo a ser consciente de que yo también estaba allí, me miró y me dijo: "No se preocupe, todo está bien, pero es un poco pequeño".

Hizo pasar a mi marido y nos mostró un puntito minúsculo que se movía muy rápido, "es el corazón". Pero no escuchamos nada. Siento que siempre que estoy en la consulta me olvido de hacerle las preguntas más importantes, entro como en una pausa cerebral durante la que soy incapaz de reaccionar. Y no pregunté si era normal no escuchar el latido y sí verlo.

Si atiné a preguntarle si debía preocuparme, y en su español rudimentario me dijo: "lo que tiene que estar está, la yema del huevo está, y hay latido. Pero es pequeño (2,4 mm.) y debemos esperar unas dos semanas para hacer una nueva eco".

Nos despidió intentando tranquilizarnos, pero yo no puedo olvidar esos primeros segundos con su mirada fija en la pantalla y sin decir nada.

Hoy es domingo. He pasado toda la semana con insomnio. Sigo sin notar ningún síntoma especial, salvo el pecho que sí está hinchado. Nada de barriga, nauseas, dolores... tampoco tengo síntomas que me hagan pensar que algo va mal. Nada de manchados, dolores... Nada.

Intento estar positiva, pero la verdad es que estoy muerta de miedo. Tengo la segunda eco el miércoles.

miércoles, 1 de junio de 2016

Dos Betas y en la cuenta atrás para la primero eco

El título de esta entrada ya da respuesta a mi post anterior. He tardado tanto en escribir, básicamente, porque aunque estoy muy feliz, también estoy muerta de miedo. Pero os cuento primero.

El pasado 19 de mayo fui, por fin, a hacerme la Beta. Estaba nerviosísima. No recordaba si había que desayunar o no antes de ir. Así que, por las dudas, solo tomé un poco de agua. Con eso solo conseguí que mis venas, que ya de por sí suelen ser difíciles de encontrar,  fueran absolutamente invisibles. Así que la enfermera alemana que me pinchó, sin mucha paciencia por otro lado, me hizo una escabechina.

Pero... ¡bendita escabechina!

El análisis fue a las 8 de la mañana. Y a las 14.35 sonaba por fín mi teléfono: Mi doctor: "el genio" al otro lado con su acento alemán-andaluz: "Matea... tengo buenas noticias. Estás embarazada. Estamos muy contentos and I think I'm gonna publish it in a journal or something" (no sé si lo he comentado anteriormente, pero "el genio" es Doctor en medicina e investigador). Yo solo atiné a decir "gracias" una y otra vez y a despedirme con un "es usted un genio" entre sollozos medio histéricos.

Nada más colgar y casi sin poder respirar recibía un mensaje de mi amorcito que había tratado de llamarme al mismo tiempo. Pulsé directamente la opción de rellamada y... no pude hablar.

Creo que nunca había llorado así, con hipo, sin poder respirar y hablar.
Así que Amorcito se temió lo peor y mientras me consolaba atiné por fín a decir "estamos embarazados".

Os podéis imaginar la reacción al otro lado, preocupación-alegría-lágrimas.

Mi beta fue de 72, según "el genio" un muy buen resultado para ese día de Beta.


Al siguiente lunes, 4 días después, me hicieron la segunda Beta. El valor fue de 203. En esta ocasión desayuné antes, mis venas no sufrieron tanto y el resultado me lo dió... una recepcionista!.
Eso es lo único que no me gusta mucho de "el genio" la comunicación no es todo lo fluida que yo quisiera.
No sé si es el carácter alemán, el protocolo del centro, pero lo cierto es que por lo que leo en otros blogs o lo que me cuentan mis amigas en España que pasan por este proceso, allí es todo mucho más fluido: llamadas, emails, whatsapps...

Le pregunté la valoración del  resultado y me dijo que en el informe ponía que era "bueno".  Lo cierto es que 4 días antes "el genio" me había dicho que esperaba que ese día se hubiera duplicado o cuadriplicado... se triplicó... así que supongo que estoy en el rango. "Bueno".

Me citaron para la primera eco el 6 de junio, es decir dentro de 5 días. Y estoy super nerviosa. Recientemente tres amigas han tenido abortos, y mi preocupación es enorme después de todo lo que he pasado. No tengo ninguna razón objetiva para pensar que algo vaya mal. Me siento bien, hasta me gustaría tener más síntomas: solo tengo más sueño, el pecho hinchado pero sin dolor, y sí me molestan algunos olores, sobre todo los perfumes. Pero nada más. Ya no siento pinchazos tampoco.

Otra amiga me dijo el otro día que a estos bebés se les llama "bebés de oro". Y entiendo perfectamente por qué... ¡¡A esperar un poco más!!